viernes, 8 de noviembre de 2019

Cumpleaños de Alvaro

  
Como todos sabéis el primer día de noviembre fue el cumple de nuestro Álvaro, nada menos que cumplió dieciocho años. Lo celebramos unos días después porque a la mayoría le venia mejor así, y solo nos faltó Tere y Eladio. 
Cuando me detengo a pensar un poco me doy cuenta de lo mayores que estáis casi todos. Todavía nos queda Marta y Javier para poder disfrutar de sus juegos. 
Como en cada acontecimiento pudimos celebrarlo con ilusión y muchas ganas de poder disfrutar de todos vosotros. Sois el motor de nuestras vidas. A veces yo también me pregunto como es posible que siga teniendo tanta ilusión y fuerzas para, como en esta ocasión, preparar la comida para los dieciocho que nos reunimos, y además hacer migas. 
Ya sabéis que vuestra abuela no miente nunca, pues os aseguro que no me canse, ni hice un gran esfuerzo. Estoy segura del motivo; vosotros que conseguís que me olvide de la edad que tengo y que gozo con todo mi ser de veros juntos. 
Álvaro, estas lineas van solo para tí, y desde lo más profundo de mi ser te digo lo que tantas veces te repito: la mayoría de edad te tiene que valer para ser mas responsable, para darte cuenta de los padres y el hermano que tienes, para dar gracias a Dios porque eres un privilegiado, porque tienes muchos dones y tienes que saber aprovecharlos, porque tienes cuatro abuelos que te queremos con locura, porque tienes unos primos que igualmente están deseando estar contigo, porque tus padres desde que naciste no han hecho otra cosa que estar pendientes de ti, y no escatiman nada por ayudarte y por muchas cosas mas. 
No sé si tantas cosas como os he dicho y os he escrito en este blog os servirá a lo largo de vuestras vidas para ser mejores personas, pero espero que sí. No soy nada más que un pequeño granito de arena en el desierto, pero siempre actuó pensando que es lo mejor. 
Cariño mio, como siempre termino dando gracias a Dios, y nosotros también somos privilegiados por sentir vuestro cariño.

martes, 3 de septiembre de 2019

SONIA Y ROCIO


Seguramente como en otras ocasiones, os estaréis preguntando quienes son estas personas a las que nombro en el título y por qué vuestra abuela les dedica esta entrada. Os saco de dudas muy rápidamente. 
Este verano, uno más, hemos tenido la suerte de poder disfrutar todos juntos unas semanas en la playa. Sabéis que casi a diario he ido a la tienda, alguna vez acompañada por alguno de vosotros. Es una tienda a la que los abuelos le tenemos un cariño muy especial. Son muchos los años que conocemos a los  actuales dueños, desde el inicio de su actividad, incluso teníamos relación con los anteriores dueños. Siempre hemos mantenido una muy buena relación con ellos y la seguimos teniendo. Y ahora ya os comento quienes son SONIA Y ROCIO. 
Mirad, son dos estupendas amigas que el Señor me ha querido regalar. Son las que con todo cariño me han guardado a diario los bocadillos y las baguettes que por las noches os comíais, mejor dicho, devorabais. Son también las que nos escogían las mejores sandías, melones,  ...... o elegían para mi cualquier articulo del que eran responsables. Son las que con su mirada, a pesar de su agotamiento, me mostraban cariño. Dos personas jóvenes, trabajadoras, responsables, que a vuestra abuela de setenta y nueve años le han transmitido siempre afecto. Son dos nuevas amigas, porque mirad, la amistad se demuestra en pequeños detalles que pueden pasar desapercibidos, pero que te producen paz, alegría y cercanía. Son las personas que tienes la seguridad de que si necesitas su ayuda no te van a fallar.
No sé si tendré la oportunidad de volverlas a ver, pero de lo que si estoy segura es que entre las tres ha surgido una relación muy especial.
Lo más curioso es que no sé nada de sus vidas, ni ellas de la mía. Solamente que Sonia es aguileña y Rocío sevillana. Es suficiente para mi.
Siempre sabéis que me gusta terminar dando gracias a Dios. En esta entrada las doy por mis dos nuevas amigas.
 

lunes, 6 de mayo de 2019

Cruz de impedidos 2019


Vuestra abuela, a los setenta y nueve años, ha podido recorrer los dos días  la procesión de la  Cruz de Impedidos todo el trayecto. Aproximadamente, el primer día recorrió un poco más de diez kms y la segunda jornada más de  nueve. El camino era, a veces, por calles con pendientes fuertes. En esta ocasión, como novedad, fui acompañada los dos días por vuestro padre, Ignacio y Alvaro. También en el primer día  por tu padre, Paula. Ni os podéis imaginar la ilusión que me hizo y la mañana tan feliz que en ambas jornadas he podido disfrutar.
Cuando eran pequeños vuestros padres, siempre me acompañaban y colaboraban en tareas necesarias, como por ejemplo, tocar la campanilla o llevar el palio.
No sé si habrá sido mi último año, da igual, todo tiene un principio y un final. Solamente me sale desde lo más profundo dar gracias a Dios  por haber podido vivir durante tantos años esta hermosa experiencia.



Pablo y Juan en la cuesta


Un nuevo año que  tenemos dos nuevos caballistas en la cuesta. Significa que os estáis haciendo mayores. Nos emociona ver como os vais incorporando a vuestros padres y tíos en ese acontecimiento tan especial de los Caballos  del Vino. Nadie mejor que ellos para enseñaros que se debe hacer para disfrutar y no correr peligro. Me ha dicho un "pajarillo" que a vuestro padre le costó un poco dar su consentimiento, quería pos-ponerlo para el próximo año. Pero la insistencia de vuestros tíos y las ganas que teníais hizo realidad vuestro sueño.
Por motivos de  sus estudios nos han faltado dos pilares muy importantes e imprescindibles en este día, Ignacio y Alvaro. Siempre que se os presente la oportunidad de realizar actividades juntos no las desperdiciéis, cultivar esa unión que a lo largo de vuestra vida dará sus frutos.
Esta entrada va a ser muy breve, pero no quería dejar de reseñar vuestra ilusión cumplida. Antes de concluir, si os quiero decir que a los abuelos se nos "cae la baba" con cualquier cosa que hagáis y que para vosotros sea bueno.




domingo, 10 de febrero de 2019

Tres de Febrero 2019


"Lo hemos  hecho con mucho amor", esa es la frase con que me respondieron los anfitriones al preguntar cómo había ido la jornada con diversas actividades programadas en Murcia por los Reyes Magos. Resultado: éxito absoluto.
No podía ser de otra forma, ¿sabéis por qué? Muy sencillo, los Reyes Magos, que tenemos que reconocer que cada año se esmeran y sorprenden más, buscaron el principal ingrediente para que fuese todo un éxito su regalo: el amor a raudales, sin medida, sin mirar el esfuerzo, añadiendo además ilusión, imaginación, ganas de agradar, .... cuidando los detalles. Imposible fracasar.
A vuestro regreso las caras contestaban todas las preguntas cuando intentaba que me contarais un poco la experiencia vivida. Todo os había parecido estupendo, divertido, risas y felicidad. Observar cómo, a veces, con aparentes cosas muy sencillas, se viven momentos estupendos de convivencia, de buen "rollo" como decís en ocasiones, de sentiros bien.
A lo largo de vuestra vida, como los Reyes son eternos gracias a Dios, sería estupendo que los pajes, sigan organizando  actividades en común que os sirvan de unión y de vivir experiencias inolvidables.
Como todos conocéis mi adoración y el cariño que le tengo a los tres Reyes, mientras viva voy a seguir pidiéndoles para que nunca os falte la ilusión que ahora tenéis y que siempre os mantengáis muy unidos.
El titulo de la entrada es para que recordéis cuando habéis hecho realidad el regalo que os prometieron los Reyes Magos.

lunes, 7 de enero de 2019

REYES 2019


En efecto, aquí me tenéis un año más intentando relatar lo vivido en este día de Reyes. Mientras que yo pueda lo voy a seguir haciendo; ya sabéis que es mi fiesta favorita.
Podréis pensar que la abuela está un poco loca, y quizás sea cierto, pero os lo aseguro, sigo creyendo en los Reyes Magos. Ayer pasamos un día mágico, con paz, alegría, ilusión, cariño, unidos y muchos calificativos más que podría agregar.
Cada año reconozco y agradezco desde lo más profundo de mi ser el gran esfuerzo de los pajes. Somos muchos y es complicado, pero una vez al año creo que el esfuerzo y el trabajo se compensa con creces ante los resultados obtenidos.
Hoy me ha comentado el P. Pascual, que sabéis fue un espectador casual, que le encantó ver las caras de los pequeños, pero también de los mayores. Nunca había vivido nada igual y daba gracias a Dios por ello.
En todos los actos de nuestra vida al que le pongamos el ingrediente principal nos saldrá siempre bien. Y, ¿sabéis cual es ese ingrediente?, uno que no podemos adquirir en ningún sitio, ni con dinero: el AMOR
Todos conocéis mi edad, sólo 78 años, pero os voy a decir un secreto, vuestra abuela es joven. La razón es muy simple, mi espíritu no envejece. Sigo con la ilusión y ganas de hacer cosas sencillas que nos pueden dar momentos de felicidad, de sentirnos queridos, de sentirnos familia pensando en los demás. Esa es la misión de estos grandes pajes, a los que llevo en  mi corazón desde lo más profundo. Por todo ello y por mucho más les aplaudo y les doy las gracias.  Han realizado un trabajo admirable, con un porcentaje de acierto del cien por cien.
Esta pequeña entrada la voy a terminar con otro secreto: los regalos de los Reyes los recibo con igual ilusión que cuando tenía la edad de nuestro Javier. Por lo tanto, hasta el próximo año mis queridos Reyes.