domingo, 8 de enero de 2023

Reyes 2023


Un año más hemos podido festejar el día precioso de los Reyes Magos. Como siempre ha sido todo un éxito. Los pajes hacen su trabajo impecable porque son únicos. A todos les doy las gracias desde lo más profundo de mi corazón y soy consciente del esfuerzo que les supone, pero para mí merece la pena. No solo por los regalos, que también, sino por ese día de convivencia, de unión, de risas, de acción de gracias al Señor manifestado en ese Padre Nuestro en recuerdo de los que están en el cielo, de ese aplauso a los Reyes Magos, y de esos besos de cariño autentico que nos damos, que a mí siempre me emociona. 

Este año también hemos festejado otra fiesta, ni más ni menos que tres cumpleaños: el de la tía Eva, Paula y Javier. En la tarta típica de chocolate que os hago pusimos las velas, cantamos el feliz cumpeaños y para finalizar, aplausos. 

Desde los Reyes Magos del año pasado no había hecho ninguna entrada. Muy mal por mi parte. Sois todos ya muy mayores y la vida pasa muy rápida, por eso es muy importante aprovechar los momentos buenos, saborearlos, poner de nuestra parte para que se repitan. Si una planta no se riega, se abona y se cuida, desaparece. Pues eso puede ocurrir en las relaciones humanas, como en la relación con Dios. A estas alturas de mi vida, decir y proclamar a los cuatro vientos  que os quiero y daría la vida por cada uno de vosotros, incluidos vuestros padres, es una certeza que me gusta repetir para que jamás lo pongais en duda. Os lo digo de verdad, y sabéis que la abuela no miente. Lo de borrón y cuenta nueva tampoco lo olvideis, porque el rencor, a la única persona que le hace daño, es a quien lo tiene. El perdón libera. Bueno, voy a terminar dando gracias a Dios porque otro año hemos celebrado la fiesta preferida de vuestra abuela.